Hace una semana te contábamos sobre la polémica pareja de influencers, Nikki Phillippi y Dan Phillippi, quienes decidieron practicar la eutanasia con su perro luego de que mordiera a su hijo.
La noticia no cayó muy bien entre sus seguidores y la comunidad de YouTube. Quienes se fueron en contra de la pareja asegurando que existían más posibilidades para el animal, como ser entregado a otras personas.
Ahora, el matrimonio de Nikki y Dan Phillippi vuelve a ser noticia luego de que su video de proceso de adopción se volviera viral. Esto porque la pareja en un mismo año, intentó en dos ocasiones adoptar desde Tailandia y Corea, donde desistieron rápidamente
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Nikki Phillippi: Una carrera llena de controversias
Luego de que sus fanáticos la aplaudieran a ella y su esposo por animarse a adoptar fuera de Estados Unidos, la historia cambió rápidamente. Semanas más tarde, Nikki informaba en un video por YouTube que preferían desistir de convertirse en padres de un niño tailandés. Esto porque las leyes del país les prohibía mostrar al bebé por redes sociales.
«Después de que recoges a tu hijo, es tu hijo, pero no puedes hablar sobre él ni compartir imágenes, fotos, videos, nada sobre él en línea durante un año», aseguró la influencer. Por su parte, Dan explicó que esto era difícil porque Nikki trabaja diariamente en su canal de YouTube.
Más tarde, la pareja informó que Tailandia no era el lugar indicado para adoptar, y que buscarían un nuevo país. Este sería Corea del Sur, el cual también puso una serie de restricciones a Nikki y Dan de no mostrar al niño en redes sociales, debido a su carrera como influencers.
Aquí los comentarios y críticas no se hicieron esperar. Sobre todo porque sus seguidores aseguraban que las intenciones de la pareja no eran puras, ya que un sacrificio de un año por el bienestar del niño no era gran problema.
Finalmente, y después de intentar adoptar en Estados Unidos y ser abandonados por su agencia de cuidados de crianza. Esto por compartir información errónea del proceso, Nikki y Dan Phillippi compartieron que estaban esperando su primer hijo, Logan.
Debido a la controversia, Nikki Phillippi puso privada sus redes sociales y no ha vuelto a compartir videos en YouTube.
