Probablemente has escuchado que una de las enfermedades que abunda en Chile es la obesidad, pero ¿Sabías que el 20% de la población en nuestro país tiene hígado graso y probablemente no lo sabe?
¡Así es! Esta es una enfermedad que es asintomática y es bastante silenciosa.
De hecho, algunos especialistas informaron que cuando presenta síntomas o malestares es cuando ha alcanzado un estado avanzado que puede derivaren otras enfermedades como cáncer hepático o cirrosis.
Es por esta razón, que en FMDOS, te contamos todo lo que tienes que saber sobre esta enfermedad.
Hígado graso: ¿Qué es y cómo lo puedo prevenir?
Pese a lo que muchos creen, el hígado graso no ocurre necesariamente por tener un excesivo consumo de alcohol. De hecho, esta enfermedad suele estar asociada a otras patologías, tales como obesidad o diabetes.
Según comentó el gastroenterólogo y hepático Guillermo Silva de clínica MEDS, este trastorno «corresponde a la acumulación de grasa, a manera de triglicéridos, que es un tipo de grasa dentro de las células que componen el hígado que se llaman hepatocitos. Cuando esta cantidad excede más del 5% de la cantidad de células propias del hígado hablamos de este trastorno».
Pero eso no es todo, ya que el médico agregó «prácticamente no existen manifestaciones y la evolución natural es la que condiciona las complicaciones. Durante mucho tiempo esta enfermedad cursa de manera asintomática Además, de las alteraciones propias de los exámenes de laboratorio».
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Asimismo, te contamos que para poder prevenir el hígado graso, la idea es tener una alimentación y un estilo de vida saludable.
«Es importante hacer un cambio en el estilo de vida, que significa reducir el peso que debería ser progresivo y gradual, pero no brusca. Se aconseja reducir la ingesta de hidratos de carbono en forma significativa, no más del 45% de la dieta en base a este componente, y una disminución de las grasas saturadas, en menos del 10 %. El ejercicio aporta un gasto calórico fijo y debiera hacerse de forma sistemática, por lo menos unos 30 minutos de actividad aeróbica intensa de 3 a 5 veces a la semana», comentó el gastroenterólogo.
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