Finalmente estamos en la cuenta regresiva y llegando a fin de año, un periodo marcado por el estrés y cansancio. Que junto con la llegada de las fiestas como Navidad y Año Nuevo, suelen incrementar los niveles de depresión y ansiedad en las personas, tal como revelan desde Harvard.
Por eso una reciente investigación que realizaron los expertos de dicha institución, sobre dar las gracias, podría cambiar radicalmente tu vida. Desde Health Harvard aseguran que practicar la gratitud, es decir, reconocer el lado bueno de tu vida, de las cosas o de las personas, puede tener un impacto positivo en tu salud.
¿Qué es la gratitud y cómo puede impactar en nuestra vida?
La palabra gratitud viene de la palabra latín gratitudo, la que significa gracia, agradecimiento o gentileza, todo dependiendo de su contexto. Esto se refiere a tener la capacidad de agradecer sobre las personas que nos rodean, las cosas que tenemos, la naturaleza o incluso un ser superior.
Las investigaciones de Harvard arrojan que la psicología positiva y la gratitud pueden tener un impacto directo en nuestra felicidad. Esto permite que las personas sientan emociones más positivas, se enfoquen en las buenas experiencias, y así puedan enfrentar de mejor manera las situaciones adversas.
Ser una persona agradecida se puede aplicar desde el pasado (recuperar recuerdos del pasado para agradecer vivencias de cuando éramos niños, adolescentes o jóvenes), del presente (a no dar por sentado todo lo que tenemos y ser consciente de ello) o del futuro (teniendo una actitud positiva y esperanzadora de la vida).
Un estudio realizado por el Dr. Robert A. Emmons de la Universidad de California, Davis, y el Dr. Michael E. McCullough de la Universidad de Miami, que se realizó a tres grupos de personas tuvo resultados sorprendentes. A uno de ellos se les indicó escribir agradecimientos durante una semana, a otro grupo sobre cosas molestas que habían vivido durante esos días, y el tercero sobre eventos que los habían afectado (sin mencionar si habían sido positivos o negativos).
Después de 10 semanas se dieron cuenta que el grupo que cada día escribía agradecimientos, se sentían más felices, optimistas, hicieron más ejercicio y visitaron con menos frecuencia al médico, versus el grupo que solo se enfocó en las quejas.
Dr. Martin EP Seligman, psicólogo de la Universidad de Pensilvania, realizó otra investigación donde le pidió a 411 personas que escribieran una carta de agradecimiento con alguien que nunca había tenido este gesto. Fue así como todos los participantes mostraron inmediatamente un aumento en su felicidad, logrando el mayor impacto en cualquier estudio que se había realizado hasta el momento.
¿Cómo practicar la gratitud según Harvard?
Cuando hablamos sobre la gratitud, no solo nos referimos a dar las gracias con más frecuencia en tu vida. Sino que aprender a vivir con una esperanza, que permita centrarse en lo que tienes y no en lo que te falta.
Si bien comenzar a practicar la gratitud puede ser de manera forzada, verás que con el tiempo se hace algo sencillo, generando un estado mental más fuerte y positivo.
Ten una libreta de gratitud
Ten un cuaderno donde puedas dejar un registro diario o semanal de situaciones, personas o experiencias que te hayan causado felicidad. Pueden ser pequeñas cosas con un delicioso café por la mañana o haber estado con una amiga que hace mucho no veías.
Escribe notas de agradecimiento
Nunca está demás nutrir las relaciones cercanas expresando tus sentimientos. Escríbele a tu familia, amigos, compañeros o aquella persona que haya tenido un impacto en tu vida un mensaje.
Además escríbete a ti una carta, al menos una vez al mes, sobre lo valioso que fuiste en ese periodo de tiempo y el aprendizaje que tuviste.
Agradece mentalmente
Si la rutina no te entrega tiempo para los dos consejos anteriores, entonces siempre puedes agradecer mentalmente por sobre escribir. Lleva a tu mente alguna situación buena, algo que hayas hecho o un momento que te haya hecho sentir feliz, y agradece mentalmente.
Sé consciente de tus bendiciones
Cuando pasamos por periodos de estrés o complejos en nuestra vida, es mucho más difícil ser consciente de lo bueno que nos rodea. Elige un día de la semana y tómate unos minutos para sentarte a escribir sobre tus bendiciones. Tener una casa, una pareja, un buen trabajo, una mascota, cualquier cosa que para ti tenga valor. Intenta escribir de tres a cinco cosas, añadiendo además sensaciones o emociones que experimentaste con aquellas situaciones.
¿Qué esperas para sumar la gratitud a tu vida?
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