Desde que comenzó su carrera en el modelaje, Kendall Jenner fue sincera sobre el trastorno de ansiedad que sufría y como este le dificulta en su día a día. Pero los comentarios no siempre fueron positivos, de hecho, muchos aseguraban que lo que decía la influencer no era real.
Ahora en un video-series creado junto a Vogue llamado Open Minded para generar conciencia sobre la salud mental, explicó los síntomas físicos de la ansiedad y esta hipocondría.
«Creo que una de las cosas más importantes es desestigmatizar todos los problemas de salud mental, en particular la ansiedad, porque mucha gente piensa que está sola con eso», explica Kendall.
¿Cuáles son los síntomas de la ansiedad?
Si bien estos pueden variar de persona a persona, suelen ser signos bastante similares.
«He tenido momentos en los que siento que necesito que me lleven de urgencia al hospital porque creo que mi corazón está fallando, no puedo respirar y necesito que alguien me ayude. A veces creo que me estoy muriendo», dijo Kendall Jenner.
La modelo reflexionó sobre cómo los privilegios que ha tenido en su vida, no la han librado de tener este trastorno de ansiedad. «Nunca me sentaría aquí y diría que no soy afortunada. Sé que vivo un estilo de vida increíble y muy privilegiado. Soy una niña muy bendecida. Pero todavía soy un ser humano al final del día.»
Kendall defendió el sentirse así, explicando que sin importar la vida que lleve, sigue siendo una persona con sentimientos y emociones reales.
Asimismo, dijo que este tiempo de pandemia y encierro le sirvió para trabajar en sí misma. «Estaba realmente abrumada, con exceso de trabajo y siempre rodeada de gente». Por eso, el regreso a la normalidad no ha sido fácil, «si voy a una cena o si veo a algunos de mis amigos más de los que estoy acostumbrada a ver durante este último año, eso me produce ansiedad».
¿Qué diferencia la ansiedad social?
Este trastorno se relaciona directamente al miedo, ansiedad e inseguridad que sienten las personas en las interacciones del día a día. Sobre todo cuando se ven expuestas a gran atención en su rutina diaria o en el trabajo.
Esta situación tiene gran impacto en la persona, ya que interviene de forma directa. Algunos de los síntomas que se suelen experimentar son: angustia por sentirse humillado, temor a hablar con extraños, sudor o temblores, latidos del corazón rápidos, malestar estomacal o náuseas, mareos o dificultad para respirar.
Los profesionales recomiendan visitar a un terapeuta cuando las situaciones sociales normales causan incomodidad y no permiten desarrollar la vida de forma natural.