La rutina, la pandemia y el trabajo, ha causado que muchas personas luchan con el estrés. Y aunque en ocasiones se considera algo normal en la vida, la verdad es que este tipo de cuadros solo causa estragos en el cuerpo, que incluye desde desconcentración hasta dolores y otros síntomas.
Tal como explica el experto de Health Cleveland Clinic, Richard Lang, «El estrés no necesariamente causa ciertas afecciones, pero puede empeorar los síntomas de esas afecciones».
El estrés es una respuesta tanto física y mental que una persona experimenta al enfrentarse a hechos cotidianos, grandes eventos, responsabilidades, entre otros. El problema es cuando este estado mental se alarga en el tiempo y no permite disfrutar el día a día.
7 formas de cómo el estrés afecta tu cuerpo
1. Dolor corporal
El estrés puede causar dolor en tus articulaciones, en tus músculos e incluso espasmos. ¿La razón? Cuando estamos bajo un estado de este tipo, nuestros músculos se tensan para estar en guardia, y cuando logramos relajarnos, los músculos liberan, dejando esta sensación de dolor.
2. Eleva la presión arterial
El corazón bombea muy rápido cuando estamos ante una situación estresante. Como resultado, los vasos sanguíneos se contraen, el oxígeno se concentra en los músculos y se eleva tu presión arterial.
El problema es que cuando el estrés se vuelve crónico, puede elevar las posibilidades de un ataque cardiaco o derrame cerebral.
3. Aparición de acné o granitos
Los desajustes hormonales son parte del estrés, provocando grandes problemas en tu piel. Aquí lo más obvio es la aparición de acné o granitos debido al aumento de sebo y grasa.
4. Dolores de cabeza y cansancio
El estrés te produce vivir en un círculo vicioso donde te sientes muy cansada, sin ganas de hacer las cosas que te apasionan e incluso sintiendo mayores dolores de cabeza durante el día. El problema es que este estado mental se vincula a dificultades para dormir e insomnio.
Cuando tienes problemas en tu ciclo de sueño, tu piel también verá los efectos. Una piel más apagada, sin vida e incluso con marcas de envejecimiento prematuro.
5. Problemas a la piel
No solo tu piel pierde la luminosidad cuando tienes ansiedad o angustia, también puedes experimentar otro tipo de afecciones como acné, psoriasis, rosácea. Cuadros que pueden empeorar si ya los padeces y no te cuidas.
6. Problemas estomacales
El estrés causa dos grandes problemas; Malestar estomacal que se relaciona con el sistema nervioso como también el consumo excesivo de comida para calmar las emociones.
Aquí puedes experimentar dolor, diarrea, gases, estreñimiento o también colon irritable o reflujo.
7. Resfriados frecuentes
Finalmente otra de las señales de que el estrés está afectando tu cuerpo es problemas con el sistema inmunológico. Un estado prolongado de tensión debilita las defensas, y por lo tanto, es más sencillo contraer gripes, resfriados e incluso enfermedades autoinmunes.
¿Qué hacer para disminuir el estrés?
Para que esto no se vuelva crónico, es importante incorporar diferentes actividades que nos permitan disminuir nuestra tensión y controlar nuestras emociones.
La idea es encontrar una estrategia que sea útil y que puede ser pasar tiempo con la familia, disfrutar de pasatiempos, realizar actividad física de forma frecuente o practicar meditación.