Si es que las setas y los champiñones no están incluidos en tu dieta cotidiana, te recomendamos hacerlo porque aportan muchos beneficios a nuestro cuerpo.
Según un estudio de la Universidad Nacional de Singapur, consumir 300 gramos de setas a la semana reduce en un 50% el riesgo de padecer deterioro cognitivo leve en los ancianos.
Esto se debe a un antioxidante y antiinflamatorio llamado ergotioneína, el cual está presente en casi todas las setas. Sin embargo este no es el único beneficio para nuestro organismo de las setas y los champiñones.
¿Cuáles son los beneficios de comer setas y champiñones?
- Un alimento con pocas calorías
Sin duda una de las ventajas de las setas es que gracias a su fibra llenan de inmediato, además tienen pocas calorías: 22 por cada 100 gramos.
La seta es un alimento muy sabroso, que puedes utilizarlo para preparar una gran variedad de platos. Buen sabor, sacia, y no engorda, ¿qué más podemos pedir?
- Contiene vitaminas, minerales y aminoácidos esenciales
Los hongos cuentan con un aporte nutricional muy valioso. De acuerdo a la Fundación Española del Corazón, contienen hierro, fósforo, yodo, magnesio, selenio, calcio, potasio, zinc, vitaminas A y del grupo B, C y D.
- Previene el cáncer
Los champiñones contienen selenio y vitamina D, por lo que son una fuente de antioxidantes, lo que ayuda a la reparación del ADN y evita que éste sufra mutaciones. Además reduce las posibilidades de que células malignas se deriven en cáncer y/o tumores.
- Favorece la reducción de colesterol
El champiñon no tiene nada de colesterol, pero sí contiene vitamina B5, recomendada para reducir el exceso de éste.
- Mejoran la flora intestinal
Algunos compuestos de las setas, como la lignina, favorecen la flora intestinal. Además ayudan a adelgazar y a prevenir tumores.
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