Si hay un sabor que todos disfrutamos, tiene que ser el del café. Puede que no todos coincidamos con el té o con algunos jugos tropicales, ¿pero una taza de café? Innegable que es lo más rico de la vida. Ya sea latte, cappuccino, o simplemente un espresso, no cabe duda de que es uno nuestros brebajes favoritos.
¿Y saben qué otra cosa es algo que todos amamos? Los postres. Son pocas las personas que he conocido en mi vida que no disfruten de un dulcecito de vez en cuando. Ya sea después del almuerzo o en el antojito de ese tiempo del mes. ¡Que cosa más rica!
Ahora, ¿qué pasaría si decidimos combinar ambas exquisiteces? Ajá, así es: un postre de café. Y, mejor aún, ¿que podamos hacerlos en casa?
En FMDOS hemos escuchado sus peticiones, y hoy, les traemos tres recetas de postres a base de café que puedes hacer desde la comodidad de tu hogar. ¡Amamos!
Tres postres de café que son fáciles de hacer en casa
1. Tiramisú
¿Acaso lo dudabas? El tiramisú es una delicia clásica que combina la exquisitez del queso mascarpone con la dulzura de unas galletas bañadas en café. Si quieres vivir tu fantasía italiana, tienes que intentar esta receta.
Receta
Ingredientes:
- 250 g de queso mascarpone
- 300 ml de crema para batir
- 100 g de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 200 ml de café espresso fuerte
- Galletas de champaña
- Cacao en polvo para espolvorear
Instrucciones:
- Parte preparando el café espresso y déjalo enfriar completamente.
- En un bowl, mezcla el queso mascarpone con el azúcar y el extracto de vainilla hasta que todo esté suave y bien incorporado.
- En otro recipiente, bate la crema hasta que se ponga firme y pueda formar picos sólidos.
- Comienza a montar el tiramisú. En un recipiente alargado, pon una capa de galletas de champaña. Luego, amontona otras galletas que hayan sido remojadas en el café. Desde ahí, ve alternando la mezcla de mascarpone con tus bizcochos humedecidos, y termina con una capa de crema.
- Cubre el tiramisú con papel film y refrigéralo durante al menos 2-3 horas.
- Antes de servirte tu porción, espolvorea todo con cacao en polvo para darle un exquisito toque de sabor.
2. Queque de café
Si los chilenos ya amamos el sabor de un buen queque con una tazita de café al lado, ¿qué nos hace pensar que no podríamos combinar ambos sabores?
Receta
Ingredientes:
- 1 y 3/4 tazas (220 g) de harina de trigo
- 1 taza (200 g) de azúcar
- 1/2 taza (120 ml) de aceite vegetal
- 1/2 taza (120 ml) de café fuerte, preferiblemente espresso (enfriado)
- 2 huevos grandes
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 cucharadita de polvo de hornear (levadura química)
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/4 cucharadita de sal
- Opcional: nueces picadas, chips de chocolate o trozos de chocolate amargo
Instrucciones:
- Precalienta el horno a 180°C, y engrasa un molde para queque con mantequilla o aceite.
- En un bowl grande, combina todos los ingredientes secos: la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal. Hazlo a un lado.
- En un recipiente aparte, bate los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa. Luego, agrega el aceite vegetal, el café (previamente enfriado) y el extracto de vainilla. Mezcla todo hasta que se vea homogéneo.
- Combina los ingredientes secos con los ingredientes húmedos y mezcla con movimientos envolventes hasta que la masa esté homogénea. Recuerda no mezclar en exceso, ¡puede que el queque quede duro! No sobre mezcles para evitar que el queque quede duro.
- Hornea tu mezcla en el horno precalentado durante aproximadamente 30-35 minutos, o hasta que, al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
- Déjalo enfriar y ¡disfruta!
3. Café helado
Si no eres fanática de pasarte horas en la cocina, no podíamos evitar traerte nuestra clásica receta chilena del café helado.
Receta
Ingredientes:
- Café espresso o café fuerte preparado (al gusto)
- Helado de vainilla (u otro sabor de tu elección)
- Opcional: salsa de chocolate, caramelo o vainilla; crema chantilly.
Instrucciones:
- Prepara una o dos tazas del café que tú desees.
- Coloca una bola grande de helado de vainilla en una taza o vaso alto.
- Vierte el café caliente (o tibio, según tu preferencia) sobre la bola de helado en el vaso. El calor del café hará que el helado se derrita un poco, creando una mezcla maravillosa para tu paladar.
- Si quieres que tu postre sea aún más delicioso, agrégale crema chantilly al final con un toque de la salsa de tu preferencia. ¡Que rico!