Un estudio elaborado por la Universidad de Chile reveló que un gran número de niños no consume las tres porciones diarias recomendadas.
El Primer Estudio de Hábitos de Consumo de Lácteos en Chile, elaborado por la Universidad de Chile, reveló cifras interesantes sobre el consumo de productos derivados de la leche en nuestros niños.
Pese a que el 98% de los menores consultados dijo tomar leche o lácteos todos los días, un 61% de los encuestados consumen dos o menos productos lácteos al día. Porción inferior a la recomendada: tres porciones al día.
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En cuánto al tipo de lácteos que se consumen, el favorito es el yogurt (36%), seguido por la leche líquida (31%) y en tercer lugar el queso (23%).
El estudio se desarrolló en colegios municipales de Estación Central, y abarcó a 372 niñas y niños de quinto básico, y tenía por finalidad saber los hábitos de consumo de los niños. Además de saber si los niños eran conscientes de los beneficios de los lácteos.
Los riesgos de consumir pocos lacteos
Sylvia Cruchet, pediatra y gastroenteróloga, comentó a 24horas.cl que «un niño que no consume tres porciones de leche al día, no va a tener calcio suficiente para ser absorbido«. Esto que puede tener repercusiones años más adelante.
«A la larga, va a tener huesos menos fuertes, lo que puede derivar en osteoporosis. Además, si no existe un aporte proteico, también puede verse afectado el crecimiento y el desarrollo muscular«, comentó la doctora.
«No hay ningún alimento que reemplace la leche en términos de calcio, en términos de zinc», asegura una de las encargadas del estudio. Además, Cruchet asegura que «un niño que no consume lácteos puede tener mucho daño en la salud, en especial si no es asesorado por un médico nutricionista«.