Durante el pasado jueves 5 de septiembre, María Becerra compartió con sus seguidores de Instagram el triste momento que vivió con su pareja actual, Julián Reininger, más conocido como J Rei.
Con una foto desde urgencias, la cantante argentina comunicó que su estado de salud luego de someterse a una intervención quirúrgica. Esto, a raíz de un embarazo ectópico que la afectó y por el cual tuvo que interrumpirse abruptamente su embarazo.
«Fue un momento inesperado, sentí dolores muy fuertes en el abdomen luego de terminar el ensayo de ayer (…) Nos enteramos de que el embarazo era ectópico y con hemorragia. Fue muy duro emocionalmente todo lo que vivimos ya que nosotros ansiábamos ser padres y tener un bebé», relató en su publicación la intérprete de 24 años.
¿Qué es un embarazo ectópico?
De acuerdo con Clínica Mayo, un embarazo ectópico ocurre cuando un óvulo fecundado se implanta y crece fuera del útero. Con mayor frecuencia, se alojan en una de las trompas de Falopio, que son los tubos que transportan los óvulos desde los ovarios hasta el útero.
«Los embarazos ectópicos no pueden continuar con normalidad. El óvulo fecundado no puede sobrevivir y el aumento de tejido puede provocar sangrado que ponga en riesgo la vida si no se trata», explican en el sitio.
La causa más común es el daño o la obstrucción en las trompas de Falopio. Esta puede ser consecuencia de infecciones pélvicas, cirugías anteriores en las trompas, inflamaciones, o condiciones como la endometriosis.
Síntomas, riesgos y tratamientos
Los síntomas de un embarazo ectópico son diversos. Por lo general, incluyen dolor abdominal intenso, sangrado vaginal irregular, dolor en los hombros o cuellos, mareos, desmayos y sensación de debilidad.
Este tipo de embarazos puede provocar desde la ruptura de la trompa de Falopio hasta una hemorragia interna grave. Esto puede llegar a significar un peligro para la vida de la persona afectada.
Entre sus tratamientos, se puede utilizar -en etapas tempranas- un medicamento llamado metotrexato para detener el crecimiento del tejido del embarazo, o -en caso de un embarazo más avanzado o si la trompa está dañada- puede ser necesaria una cirugía.
Es importante destacar que, ante cualquier sospecha que puedas tener de que estás padeciendo estos síntomas, debes consultar inmediatamente con un profesional de la salud.