El príncipe Harry nuevamente ha entregado varias declaraciones íntimas, que sin duda sacarán ronchas en la realeza, sobre todo porque habló por primera vez sobre la razón que lo llevó a abusar del alcohol y las drogas.
En medio del programa de Apple TV+ de Opran Winfrey, «The me you can’t see», Harry aseguró que lleva años batallando con su salud mental y la exposición a los medios, que lo llevó incluso a retirarse de la realeza.
El duque de Sussex explicó que asiste a terapia desde hace cuatro años, con el propósito de poder «curarse del pasado». «Cuatro años de terapia para una persona que nunca pensó que alguna vez lo necesitaría es mucho tiempo. Tampoco estaba en un ambiente que motivara a hablar de eso. Fue como… mejor quedarme callado», aseguró a Oprah.
La muerte de Diana de Gales
Con solo 12 años, nadie preparó a Harry para lo que tendría que vivir con una pérdida tan difícil. Sobre todo con un accidente que marcaría un antes y después en su vida, y que los medios de comunicación y paparazzis estaban involucrados.
Desde ahí todo cambió, porque el príncipe nunca fue capaz de procesar el dolor de la forma correcta. «No quiero pensar en ella, porque si pienso en ella me acuerdo de que no puedo traerla de vuelta y me voy a poner triste. ¿De qué sirve pensar en algo triste? ¿Cuál es el punto de pensar en alguien que has perdido y que nunca va a regresar? Y simplemente decidí no hablar de eso. Nadie hablaba de eso».
Pero los demonios lo siguieron al crecer, y cuando el duque de Sussex se vio en la obligación de cumplir sus deberes reales, comprendió que la ansiedad lo acompañaba a todos lados. Estos venían con ataques de pánicos que el príncipe recuerda como «una pesadilla».
«Cada vez que me subía al coche y cada vez que veía una cámara empezaba a sudar. Sentía como si la temperatura de mi cuerpo fuera dos o tres grados más alta que la de todos los demás. Me convencí a mí mismo de que mi cara estaba totalmente roja y que todos podrían ver cómo me sentía, pero nadie sabría por qué. Fue muy embarazoso. Se te mete todo en la cabeza».
Las drogas y el alcohol como vía de escape
Todos recuerdan los años más locos de Harry, ya que era portada frecuente en sus noches de excesos. Y por primera vez el príncipe explicó que las drogas y el alcohol fueron su vía de escape para poder superar los momentos difíciles de su vida. «Estaba dispuesto a beber, estaba dispuesto a tomar drogas, estaba dispuesto a intentar hacer las cosas que no me hacían sentir como me sentía».
Rápidamente el príncipe Harry se dio cuenta que en un día bebía todo lo de la semana, y no lo disfrutaba, ya que lo hacía solo por esconder cómo se sentía.
Entrar al ejercito y permanecer ahí por 10 años le cambió la vida, sobre todo porque no había trato preferencial o vestigios de su vida en la realeza. Aún así, asegura que su familia no le prestó la ayuda necesaria como a él le hubiese gustado «Pensé que mi familia ayudaría, pero a cada pregunta, solicitud, advertencia, lo que sea… recibía un silencio total».
Las consecuencias que aún lo acompañan
Acceder a la terapia para resolver problemas que lo acompañaban desde su crianza, fue la mejor manera para avanzar, pero no fue sencillo. Aún así, la ayuda psicológica hizo que todas sus emociones salieran a la luz.
«Fue como si alguien hubiera tapado todas las emociones que había reprimido durante tantos años y de repente pasaron a un primer plano. Vi a médicos de cabecera, terapeutas… vi a todo tipo de personas».
Su misma terapeuta le permitió volver a sentir sus emociones, sin estar a la defensiva. Su psicóloga le dijo, «Parece que estás volviendo al Harry de los 12 años’. Me sentí un poco avergonzado y me puse a la defensiva, en plan: ‘¿Cómo te atreves, me estás llamando niño?’. Ella dijo: «No te estoy llamando niño. Estoy mostrando empatía por lo que te sucedió cuando eras un niño. Nunca lo procesaste. Nunca se te permitió hablar de ello. Y ahora todo vuelve de forma repentina y se manifiesta de diferentes maneras».
Pero al conocer a Meghan, Harry entendió que debía sanarse del todo, de lo contrario, «iba a perder a la mujer con la que quería pasar el resto de mi vida».
La imagen de Diana más viva que nunca
A pesar de los años que han pasado, el príncipe Harry aún conserva una imagen de su madre en la pieza de su hijo Archie.
«Tengo una foto de ella en su habitación, y una de las primeras palabras que dijo, aparte de mamá, papá, fue abuela. Abuela Diana», aseguró Harry.
Y este momento dulce, rápidamente se convirtió en uno triste. «Ella debería estar aquí. Ojalá hubiera conocido a Meghan. Ojalá estuviera cerca de Archie», concluyó el príncipe Harry.
