Luego de que se hiciera conocida la demanda civil de abuso sexual contra el príncipe Andrés, las alarmas para la familia real Británica han vuelto a encenderse. Esto porque, según la revista Quién, no sería coincidencia que tras la publicación del hecho, la reina Isabel II haya mandado a llamar a su hijo.
La reunión de la realeza Británica, se realizó solo un día después de la publicación de la noticia por parte de variados medios internacionales. Pese a que la reina Isabel II se encontraba de vacaciones, su hijo, noveno en la línea de sucesión al trono, debió acudir al llamado.
De hecho, el príncipe Andrés fue visto dirigiéndose a la propiedad escocesa, acompañado de su esposa, Sarah Ferguson.
Por el momento, no ha aparecido información oficial tras la acusación de abuso sexual contra el príncipe. Pese a que este parece ser una duro golpe para la familia real. Según la experta en realeza Angela Levin «La familia real sabía que el príncipe Andrés encontraría más problemas (por su vínculo con Epstein). Por eso decidió mantenerlo alejado de la vida pública«.
William contra el príncipe Andrés
En el mismo contexto, el medio MailOnline reveló que los miembros de la realeza de mayor rango estarían discutiendo si Andrés debería mantener Royal Lodge. Una mansión de 30 habitaciones donde Andrés vive desde 2008, junto a su exesposa Sarah Ferguson.
«El escándalo personal en curso que involucra al príncipe Andrés y Jeffrey Epstein es una fuente de mucha angustia para Carlos y William, que están tratando de proteger a la monarquía», aseguró una fuente a Daily Mail. Y agregó que «Se cree que el príncipe William ha expresado interés en hacerse cargo de Royal Lodge en algún momento en el futuro y es poco probable que Carlos se interponga en su camino».
Recordemos que desde que se destapó el caso Epstein, la familia real ha mantenido al príncipe Andrés alejado de la vida pública. De hecho, le retiraron sus responsabilidades como miembro de la realeza.