Este fin de semana Meghan Markle y el príncipe Harry asistieron a un evento muy especial para ambos: la boda de la amiga que los presentó. La responsable de esa tarea fue la diseñadora Misha Nonoo, quien se casó en Roma con Michael Hess.
Por supuesto, los duques de Sussex no faltaron a la celebración y fueron vestidos como la ocasión lo ameritaba. En ese contexto, fue el look de Markle el que se robó la atención en particular.
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La exactriz se lució con un vestido largo de tul y seda negra semitransparente. El diseño contaba además con mangas voluminosas y detalles brillantes. Cabe señalar que el outfit de la duquesa era de la marca de lujo Valentino y según la revista «Elle», está avaluado en 10 mil euros (cerca de 8 millones de pesos).
Meghan Markle complementó su look con unos aros dorados, un moño bajo desordenado y un maquillaje sutil.
Por lo demás, al matrimonio asistieron una serie de celebridades como Katy Perry y Orlando Bloom, Eugenia y Beatriz de York, Ivanka Trump y James Corden.
