Les dicen las «ballenas asesinas«, pero parece que esta orca estaba lejos de ganarse ese apodo.
Lukas Reilly se encontraba haciendo Stand Up Paddle cuando una orca se le acercó a su tabla y se quedó junto a él. Primero pasó por debajo, luego atrás y termino a su lado. Se notaba que el neozalandés estaba nervioso, pero sonrió cuando vio que el cetáceo se estaba marchando.
Este vídeo fue destacado por GoPro, como una de las mejores tomas con sus cámaras.
Te mostramos el increíble encuentro: