Julia Wendell, la joven que afirmaba ser Madeleine McCann fue denunciada a la policía de California por unas supuestas imágenes explícitas en su celular.
Según se reveló, el teléfono fue entregado a investigaciones por Fia Johansson, una investigadora privada y médium que llevó a la joven a Estados Unidos.
“No tenía pornografía infantil en mi teléfono. No soy una pedófila. Soy víctima de un pedófilo“, aclaró Julia Wendell luego de mudarse a EE.UU tras recibir amenazas en Polonia.
Por su parte, Johannson explicó que “Julia tuvo una infancia difícil. Sabemos que fue abusada sexualmente, fue muy abierta al respecto y mi investigación descubrió registros legales que prueban que esto era cierto”.
Esta noticia se supo luego de que la joven planeara una segunda prueba de ADN tras descartarse que es Madeleine McCann, la pequeña niña que desapareció en Portugal en 2007.
Pero esta no es la primera vez que Wendell dice ser una persona desaparecida y es que según una investigación periodística, la polaca ya había afirmado ser otras tres niñas extraviadas.
Cuando se supo el resultado de ADN, Julia escribió un comunicado: “No era mi intención traer tristeza o cualquier otra emoción negativa a nadie, especialmente a la familia de McCann”. Sin embargo, de todas maneras quiere una segunda prueba.
La versión de Julia Wendell
La joven de 21 años siempre cuestionó su infancia aclarando que no tiene recuerdos claros. “No recuerdo la mayor parte de mi infancia, pero mi primer recuerdo es muy fuerte y se trata de vacaciones en un lugar cálido donde hay una playa y edificios blancos o de colores muy claros con apartamentos”, dijo. “No veo a mi familia en este recuerdo”.
De hecho, explicó que su madre siempre trató de evitar el tema y “no quería mostrarme ninguna prueba”.
Sin embargo, sus padres emitieron un comunicado: “Para nosotros como familia, es obvio que Julia es nuestra hija, nieta, hermana, sobrina, prima y sobrina. Tenemos recuerdos, tenemos fotos. Julia Wendell también tiene estas fotos, porque las tomó de la casa familiar con el acta de nacimiento”.
“Siempre tratamos de entender todas las situaciones que sucedieron con ella”, afirmaron. “Amenazas a nuestra dirección por parte de Julia, sus mentiras y manipulaciones, actividad en internet… lo vimos todo y tratamos de prevenirlo, explicarle, le pedimos que se detenga”, añadieron.
“Siempre tratamos de ayudarla a recuperarse. Julia Wendell es mayor de edad desde hace varios años. Ella se mudó de la casa. Ella rechaza el tratamiento, no toma medicamentos regularmente. Tampoco aprovechó la posibilidad de tratamiento en un muy buen centro de Polonia”, explicaron.
