A meses de competir en los Juegos Panamericanos 2019 y el Campeonato Mundial de Gimnasia Artística, el gimnasta chileno Tomás González revela una preocupante situación: no cuenta con auspiciadores que lo ayuden en su preparación.
Así lo aseveró en conversación con el diario «La Cuarta», donde explicó que «La clínica Meds me apoya en la parte médica, pero así auspicio como contrato, no. Sí tengo algunos canjes que duran cierta cantidad de meses, que obvio que es una ayuda, para el día a día”.
Sobre posibles interesados en entregar apoyo en lo que viene, el destacado gimnasta asegura que “no hay nada. Ni siquiera marca de ropa. Me ha costado harto. Sería útil, pero llega un punto que cuando ya tocas todas las puertas, todas las marcas, dices ya, que sea lo que salga no más”.
González cree que esta situación se puede explicar “un poco en lo chaquetero que somos”.
Luego puntualiza: “Me están retirando hace rato, y eso no me ayuda. Algunas personas me dicen ‘¿pero sigues compitiendo?’ y como acá no hay mucha cobertura de las competencias, no le llega mucho a la gente, por eso también uso más las redes”.
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“Es fome, pero es como la historia que yo he vivido siempre acá en Chile. Siempre ha sido difícil y finalmente me enfoco en lo que tengo que hacer, demostrando un poco. Soy de pocas palabras, soy más de demostrar. Los hechos hablan por sí solos”, agregó Tomás al medio.
Pese a esta situación, el que ha sido el mejor gimnasta chileno de todos los tiempos asegura que hoy se dedica a lo suyo.
«Al final es como que lo hago por el país a estas alturas, es un compromiso que tengo con el país. Pero también porque yo quiero estar ahí, en los Juegos Olímpicos y representar a Chile, dejarlo en lo más alto que se pueda”, sentencia.
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