Hay una tradición muy famosa en Chile: tomar una copita de vino, whisky, pisco o lo que sea que tenga alcohol, te da calor.
Ya que estamos pasando por una ola de frío polar en gran parte de nuestro país, es importante saber si este mito es verdadero o falso.
Lamentamos informales que en esencia es falso, aunque tiene algo de verdad… y estas son las razones:
Cuando tu cuerpo tiene frío, de inmediato reacciona disminuyendo la circulación en tus manos y piernas concentrando la sangre caliente en tu pecho y cabeza. Si el frío sigue en aumento los vasos se seguirán estrechando y concentrando la sangre en los órganos vitales. Es un sistema de defensa y conservación de calor. Si tomas alcohol en estas circunstancias, estás contrarrestando este sistema y perdiendo calor.
¿Por qué?
En realidad, el consumo de alcohol hace que la temperatura del cuerpo descienda, porque la dilatación de las arterias cutáneas acelera la pérdida de calor.
Como el alcohol es un vasodilatador, provoca que los vasos sanguíneos (específicamente los capilares ubicados debajo de la superficie de la piel) se agranden; provocando que el volumen de la sangre llegue hasta la superficie de la piel ocasionando que esta se sienta caliente, pero eso es solo una reacción inmediata.
Además el alcohol atrofia otros reflejos que controlan la temperatura corporal, por ejemplo, reduce la habilidad de temblar o estremecerse, que es una forma natural que tiene el cuerpo de generar calor.
En conclusión, no es recomendable tomar un trago para calentarse cuando hace frío.
Fuente: conacytprensa.mx