Las toallitas desmaquillantes se usan para remover los rastros de cosméticos y la suciedad en el rostro.
Y si bien su aplicación parece muy sencilla, lo cierto es que si no las empleas bien puedes dañar tu rostro, irritarlo, enrojecerlo o, incluso, causarle algún tipo de alergia.
Por lo tanto, si quieres conseguir un buen impacto sobre tu piel con este producto, toma nota de los siguientes tips:
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1-Lo primero es asegurarte de que las toallitas desmaquillantes sean acorde a tu tipo de cutis, ya que las hay para pieles normales, sensibles, secas, grasas o mixtas.
2-Las toallitas no deben tener perfume -no es necesario que lo contengan- y deben ser hipoalergénicas para no irritar tu cutis. Ya bastante tienes con el maquillaje.
3-Si tienes la piel mixta o seca, debes enjuagar tu rostro después de aplicar la toallita y usar una crema humectante. De este modo, tu piel no se resecará tanto.
4-Cuando uses tus toallitas desmaquillantes, debes limpiar como si estuvieses masajeando. Es decir, con movimientos circulares y muy suaves para no dañar tu cara.
5-No uses las toallitas cerca de tus ojos o tus labios, porque al ser zonas muy delicadas, pueden irritarse fácilmente. De hecho, si buscas bien, encontrarás toallitas especiales para esas zonas en particular.
6-Cuando hayas utilizado la toallita húmeda por tu rostro, debes enjuagar muy bien para así eliminar cualquier rastro de suciedad que haya quedado. Si no limpias bien tu rostro, ni le dedicas todo el cuidado que merece, éste podría sufrir irritaciones.
