La Universidad de Tufts, que descubrió que tener un perro o un gato hace bien a la relación de pareja.
Según la investigación, las personas muy involucradas en el cuidado de su mascota tienen relaciones amorosas más profundas, porque se potencia la ternura, generan lazos de confianza y seguridad en el otro, además son menos solitarios y tienen mejor autoestima.