Si quieres amanecer con el vientre plano, conoce lo que debieras cenar y lo que no debieras.
Tips básicos
Lo primero es controlar las cantidades que ingerimos. Evidentemente, si comemos mucho, ya no será un problema de hinchazón, sino de aumento de peso y exceso de grasa.
Lo segundo que tenemos que tener en cuenta es que las digestiones sean rápidas, ya que con unas digestiones lentas es muy probable que los alimentos fermenten y eso provoque formación de gases.
Hay que evitar también el estrés, que aumentará la cantidad de cortisol segregado y eso provoca que se acumulen grasas. El estrés provoca que comamos más rápidamente, que mastiquemos menos, que traguemos gases y que aumente además su formación.
Y, por último, debemos evitar también la retención de líquidos, mejorar el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento.
Qué cenar
Pepino
Contiene flavonoides como la quercetina, que ayuda a disminuir la inflamación, contiene hasta un 96% de agua, por lo que los podemos añadir en las ensaladas, en sándwiches o incluso comerlo crudo, como palitos para los dips.
El apio, al igual que el pepino, va a ayudar a disminuir la inflamación y mejorar el vientre plano.
Yogur
Excelente fuente de probióticos, lo que ayudará a que la digestión sea más ligera, lo que como explicábamos evita que se formen gases en el estómago.
Sopa o caldo vegetal
Los vegetales bien cocinados, evitan la dificultad de digestión, y el caldo aporta gran contenido de nutrientes, es de fácil digestión, bajo en calorías y a la vez ayuda a mejorar la hidratación y a eliminar líquidos si tenemos tendencia a retenerlos. Es, sin duda, el mejor primer plato de la cena.
Jengibre
Es uno de los productos que podemos añadir en la comida y es perfecto para mantener el vientre plano, pues ayuda a que las digestiones sean más rápidas y fáciles.
Se puede espolvorear jengibre rayado encima de las comidas como los purés, cremas o incluso de forma más fácil en una tisana con jengibre y limón para después de la cena, como opción para sustituir el postre.
Espárragos
Contienen muchos antioxidantes y fibras insolubles que ayudan a mejorar el tránsito intestinal sin absorber agua y a mejorar las digestiones.
Son muy diuréticos, por lo que pueden echarte una mano para prevenir la retención de líquidos y eliminar las toxinas.
Papaya y piña
Ambas frutas son muy ricas en enzimas digestivos, como la papaína y la bromelaina, que van a ayudar a digerir la comida y evitar la hinchazón del estómago.
Estas frutas las podemos comer de postre, pero también añadiéndolas en ensaladas, batidos o incluso con las verduras a la parrilla.
Pescado
Ideal como plato principal en la cena y como alternativa las aves como el pollo o el pavo.
Aunque, eso sí, siempre cocinado a la plancha, vapor u horno, sin muchas salsas. Podemos añadir alguna especia y aceite de oliva, pues es preferible comerlo con poca sal.
Los alimentos que debes evitar
Verduras
Por su propia composición son flatulentas o provocan la formación de gases. Sobre todo los que tienen un alto contenido en sulfuros, como pueden ser las coles, coliflor, coles de Bruselas, repollo, otras como la cebolla, puerros, ajos o pimientos.
Lácteos
No a todo el mundo le sienta bien la leche, concretamente la lactosa. Su ingesta provoca digestiones más pesadas y lentas, sobre todo si la leche o el lácteo es más rico en grasas.
Gluten y fibras
Las personas intolerantes al gluten saben que no pueden comerlo para evitar este efecto, aunque es muy habitual que sea simplemente por dificultad de digestión, por lo que es preferible eliminarlos.
La fibra soluble
Es paradójico que tiene efecto laxante, por lo que podríamos pensar que para conseguir el vientre plano será beneficioso, pero sin embargo algunas veces es al contrario.
Esta fibra absorbe el agua del sistema digestivo, por lo que ayuda a que mejore el tránsito intestinal al aumentar el bolo alimenticio.
Pero si nos pasamos y la tomamos en exceso, provoca la formación de gases. Algunos alimentos que tienen alto contenido en fibra soluble son las legumbres. Los cereales integrales pueden producir gases, con la excepción del arroz.
Algunas frutas como pueden ser las ciruelas o las peras.
Pasta poco cocinada o demasiado ‘al dente’, pues produce gases al ser mucho más difícil de digerir. También hay que intentar evitar el pan industrial poco horneado y más si es caliente.
Alimentos muy salados, porque van a provocar la retención de líquidos, así como bebidas gaseosas, con alcohol y fermentadas. Si bebemos gas, este va a provocar que se hinche el estómago.
Fuente: Revista Hola!