Desde hace un par de meses que el famoso «Contouring» reina en el mundo de la belleza. Esta técnica de maquillaje, popularizado por Kim Kardashian, busca crear luces y sombras que perfilan el rostro. Pero no sólo de maquillaje vive el contouring, porque ahora también puedes usarlo en tu cabello.
La nueva tendencia para esta temporada es el «Hair Contouring», en el que es importante contornear y resaltar las facciones de nuestro rostro al jugar con las luces y sobras de nuestro pelo. Para esto es importante tener en cuenta nuestro tipo de rostro. Los expertos recomiendan:
Rostro redondo: la estrategia de «hair contourig» con este tipo de cara es la de elongar la mitad inferior del rostro. Para ello, se ilumina la mitad superior con tonos claros desde la raíz hasta las orejas y resaltar en los mechones delanteros, para ir añadiendo tonos más oscuros combinados hasta las puntas de la melena.
Rostro alargado: el «hair contourig» se centrará en acortar la longitud de este tipo de cara, combinando una raíz oscura con destellos más claros y luminosos que brotan por encima de la línea de las orejas hasta las puntas.
Rostro con forma de corazón: con este tipo de rostro, lo que se debe intentar es iluminar la mitad inferior de la cara (de orejas a mandíbula) para compensar la amplitud de la frente. Para ello, se puede partir de un color más oscuro desde las raíces hasta las orejas y degradar con tonos más luminosos de ahí a las puntas. Todo ello, incidiendo en los mechones más cercanos al rostro.
– Rostro cuadrado: en este tipo de cara, de lo que se trata es de recortar amplitud tanto en la frente como en la zona del mentón, con lo que el «hair contouring» consistirá en jugar con una mezcla de tonos oscuros (chocolates y avellana) desde la raíz, para degradar en tonos más luminosos en el tramo que va de las sienes al comienzo de la mandíbula, donde los tonos oscuros volverán a cobrar protagonismo de una forma más intensa, para buscar así un corte más ovalado.