Acurrucarte en casa puede ser el secreto para mejorar tu salud mental, así lo confirman los expertos. Una práctica que se hace más necesaria que nunca con el regreso de las cuarentenas obligatorias y la baja movilidad que se nos permite en la ciudad.
Y es que en un mundo en donde debemos evitar el contacto físico para evitar contagios, lo mejor es acurrucarte para regalarte calor, amor y seguridad.
No solo hace bien para tu cuerpo, sino que también para tu mente, y hay evidencia que lo comprueba. La explicación es sencilla; este simple acto permite estimular diferentes hormonas como la oxitocina, relacionada al amor y el efecto.
Este neurotransmisor afecta de forma positiva nuestro cerebro, aumentando los niveles de serotonina y dopamina que ayudan a la felicidad y el bienestar. Además, brinda empatía, conexión humana y unión.
¿Debo tener pareja para lograr estos beneficios?
Aquí no hay reglas. Puedes acurrucarte junto a tu pareja, tu familia, tu mascota o sola. Sin importar tu estado de relación, puedes obtener los mismos beneficios y generar la misma sensación.
“Si bien un animal de peluche y una manta pueden no ser un sustituto de relaciones humanas, sí pueden estimular una actividad cerebral similar: sentimientos de amor, seguridad, confort y bienestar”, asegura la psicoterapeuta Dana Dorfman.
Conoce aquí los beneficios de acurrucarse
Mejoras tu ciclo de sueño
La hora de dormir puede ser el mejor momento para acurrucarte. Esta cercanía física permitirá que disminuya el cortisol o también conocida como la hormona del estrés.
Al reducir este estado anímico, permitirás promover sentimientos como seguridad, relajación, y amor, que te permitirán un mejor descanso y menos pesadillas.
Reduce los dolores
¿Alguna vez te has acurrucado cuando te sientes adolorida y has notado que poco a poco este sufrimiento se disipa?
El especialista en medicina holística integrada, Dr. Harry Eugene, asegura que acurrucarte permite bloquear las señales de dolores que llegan al cerebro, ayudando a tolerar de mejor forma estas molestias.
Todo se debe a que la oxitocina es uno de los mejores antídotos para el dolor físico y emocional.
Mejora tu sistema inmune
La respuesta a acurrucarte o abrazarse eleva la serotonina (u hormona de la felicidad) reduciendo el estrés de nuestro cuerpo, disminuyendo la inflamación, permitiéndonos luchar contra diferentes enfermedades y mejorar el sistema inmune.
Hacerlo de forma frecuente nos permite ayudar a nuestro organismo de forma gratuita y práctica. Sobre todo que ahora viene el clima más frío.
Ayuda a tener una buena salud intestinal
Mientras más frecuente te abraces, mayor cantidad de serotonina estaremos liberando. Esto nos permitirá que nuestro sistema digestivo procese de mejor forma los alimentos.
“Como la serotonina se almacena en el intestino, afecta significativamente el funcionamiento digestivo, el hambre y la saciedad. Esta es la razón por la que podemos disfrutar de los alimentos al comer, y al sentirnos deprimidos, podemos perder nuestro apetito”, explica el Dr. Dorfman.
Controla tu presión arterial
Acurrucarte le permitirá a tu cuerpo disminuir drásticamente el estrés, un aspecto positivo para la salud de tu corazón.
Un estudio comprobó que un grupo de parejas que se sostuvieron la mano por 10 minutos junto con un abrazo de 20 segundos disminuyeron sus niveles de presión arterial y frecuencia cardíaca de forma considerable.
¿Cuántos abrazos necesitamos al día?
De acuerdo a la ciencia, mientras más abrazos te regales, mayores efectos positivos tendrás en tu organismo.
Si estás sola, simplemente necesitas una manta y unos minutos de relajo en tu cama, en un sofá o una silla. ¿Qué mejor si lo acompañas con un delicioso té?