«No culpes a JuaPía», es un espacio que debutó hace tres semanas a través del Instagram TV del programa Rojo. Ahí, el condutor del programa, Álvaro Escobar, conversó con Juan Ángel Malorca y Pía María Silva sobre un gran tatuaje que tiene en su brazo derecho desde 1998, pero que aún no ha terminado.
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Según señala LUN, Escobar contó que se había hecho el tatuaje en el paseo Las Palmas, y que en la primera sesión se marcó con tinta el dibujo de una carta del tarot celta.
El segundo paso era colorear el tatuaje. Sin embargo, el animador contó que «cuando iba a la otra sesión, como una o dos semanas después, la persona que lo hacía estaba con licencia, había tenido una crisis de salud y desapareció del mapa».
Consultado por lo que le había pasado al tatuador, el ex diputado respondió: «lo supe pero no lo puedo contar. Hasta hoy el tatuaje quedó en blanco y negro, sólo el dibujo».
¿Qué significa?
Según el relato de Álvaro Escobar, el dibujo fue realizado en una época en la que él sentía que iba a tener un cambio en la vida, que que acababa de terminar su participación en la película «El Entusiasmo» y tenía la idea de seguir en esa línea, alejándose de las teleseries. Fue por eso que decidió marcar el cambio con un tatuaje.
«Es un arcano mayor del tarot celta que me traje de un viaje a Nueva York el 95», dice Escobar a LUN. «En el tarot tradicional equivale al Sumo Sacerdote, un puente entre lo divino y la tierra. Años después un amigo entendido me dijo que era la carta de El mundo del tarot, jajá».
En el dibujo aparece una persona (un señor) sentado con una lanza quebrada, mirando el mapa de lo recorrido hasta el minuto. «La interpretación que yo le daba era alguien mirando los territorios perdidos», dice, y añade que «el diseño significaba un tiempo de pausa que yo buscaba en ese momento»:
¿Por qué en 21 años no ha terminado el tatuaje?
«La verdad… no soy amigo de las agujas», señala Escobar, a lo que añade que lo pasa mal incluso cuando se va a vacunar. «Así que eso lo tomo como una señal y me pregunto: ‘¿para qué me voy a terminar esta cuestión?’. Además dejó de estar presente la motivación, la inspiración espiritual de ese momento, pero nunca he dejado de sentir que debo terminarlo.
