La cantidad de sudor depende de cada persona, y habitualmente aparece en lugares como la espalda, entre los muslos, debajo de los pecho y en las axilas.
Pero aunque es normal transpirar, para algunas personas es un verdadero suplicio porque sufren de sudoración excesiva o “hiperhidrosis”. Si tus manos, pies o partes de la cara están la mayor parte del tiempo empapados o si transpiras aunque el ambiente sea freso, puede que sea tu caso.
Para esto, tenemos 4 posibles soluciones:
- Aplicar desodorante en la noche
Las glandulas sudoríparas están menos activas durante la noche, por lo que si te aplicas un anti -ranspirante, será mejor absorbido y tendrás mejores resultados al día siguiente. A la mañana siguiente, luego de ducharte vuelve a poner desodorante. El efecto será el doble.
- Evitar estar expuesto a temperaturas extremas
No hagas actividad física entre las 11 y 16 horas, ya que el sol está en su punto máximo. Si lo haces antes o después, ayudarás a que tu cuerpo regule de mejor manera la temperatura.
- Botox
Aunque no es una medida muy barata, si es efectiva para las personas que realmente sufren con esto. Se aplica el Botox para bloquear el nervio que activa las glándulas sudoríparas, y la duración del tratamiento luego de la primera sesión, es de 3 meses. Luego, en las siguientes puede llegar a los 6 meses.
- Cremas especiales
En el mercado podemos encontrar diversos productos que contienen cloruro de aluminio, y lo que hace es lidiar de mejor manera las glándulas sudoríparas. Es un «súper antitranspirante» recetado por especialistas, que puede ser aplicado en cualquier parte del cuerpo.