¡Simplemente esta historia es para no creer! El nombre de la estadounidense Christy Sheats ha dado la vuelta al mundo, luego de que decidiera quitarle la vida a sus hijas, para vengarse de su marido que le había pedido el divorcio definitivo.
Hace un par de días, ella citó a su familia a una reunión hasta donde llegaron Taylor de 22 años, Madison de 17 y su marido Jason Sheats. A ellos les dijo que el encuentro era para conversar sobre los papeles que harían oficial la separación.
Sin embargo, esto se trataba de un plan macabro, ya que cuando estaban todos juntos, la mujer sacó una pistola de su pantalón y disparó en reiteradas ocasiones a las dos jóvenes ante los ojos del papá.
Cuando Sheats vio lo que estaba sucediendo, desesperado se puso frente a ella para que sus hijas pudieran correr, sin embargo en cosa de segundos cayeron al suelo. La mayor murió en el lugar producto de las balas en su espalda y la menor, cuando estaba siendo atendida en el hospital, por los disparos en el cuello.
Troy Nehls, uno de los policías que revisó el caso dijo que: «Christy Sheats tuvo suficiente tiempo y oportunidad para matar a su marido, pero eligió no hacerlo». Al mismo tiempo, el padre de las niñas declaró que su mujer sufría de depresión y que se encontraba con tratamientos psicológicos. «Estaba tomando numerosos medicamentos y viendo a un terapeuta. Había sido admitida en un centro de salud mental privada tres veces en los últimos años por intento de suicidio».
La muerte de las jóvenes causó gran conmoción en Estados Unidos y dentro de la comunidad de Fort Bend donde vivían, ya que ambas eran catalogadas como personas intachables. Taylor se había graduado con honores y quería estudiar arte. Además, sus cercanos señalaron que estaba comprometida y se casaría justo cuatro días después de su muerte.
Por otro lado, Madison estudiaba en la escuela secundaria y trabajaba como niñera en sus ratos libres para juntar dinero y estudiar fuera de su país.
Cabe mencionar, que la policía recibió la llamada de alerta por parte de una de las jóvenes que marcó el teléfono cuando su mamá estaba a punto de dispararles. Casi cuarenta minutos después llegaron hasta el lugar, donde la mamá de las niñas también perdió la vida, luego de que un policía le disparara, porque estaba muy alterada y sin deseos de devolver su pistola.
¡Aquí puedes escuchar el audio que recibió el 911!
https://youtu.be/mJt1OV8jEoU