Después de una maratónica jornada, el Senado argentino rechazó el proyecto que pretendía ampliar los supuestos de despenalización del aborto, volviéndolo libre y gratuito, ya que hasta ahora solo se permite en caso de violación o riesgo para la madre.
Los legisladores de la Cámara Alta debatieron durante más de 12 horas, mientras en las proximidades del Congreso una movilización multitudinaria esperaba la resolución: a un lado, los partidarios del aborto legal, seguro y gratuito; al otro, los que se oponían y querían que se mantuviera como un delito penado con la cárcel.
Con 38 votos en contra, 31 a favor y 2 abstenciones, la iniciativa quedó zanjada y únicamente podrá volver a tratarse dentro del próximo periodo legislativo, o sea, el 2019.
Ello, aunque la ley de aborto libre ya contaba con el visto bueno de la Cámara de Diputados.