Más de alguna vez hemos estado horas y días cantando una canción con un ritmo pegajoso que no podemos dejar de tararear, ¿o no?
¡Tranquila! Unos investigadores de la Universidad de Reading en Inglaterra encontraron una excelente solución para dejar atrás ese tema que no sale de nuestra cabeza: mascar chicle.
Sí, el chicle es la mejor técnica para dejar de tararear esas canciones porque las vías mentales que funcionan en el oído son las que mantienen esas melodías pegajosas. Por esta razón, al mascar chicle y utilizar nuestra mandíbula, se limpian esas vías. ¿Qué tal?