La última portada de la revista «Vogue» ha causado revuelo, no por tener a una gran celebridad o por imponer un estilo único, sino por el uso de Photoshop que sufrió la modelo plus size Ashley Graham.
Esta publicación, celebra el aniversario número 125 de la revista estadounidense e incluyó a distintas modelos todas ellas con características distintas, entre ellas aparecen Kendall Jenner, Gigi Hadid, Imaan Hammam y la mencionada Graham. En la fotografía aparecen todas con poleras negras y shorts de colores, siendo el titular de esta: «La belleza de la revolución. La no norma es la nueva norma».
Si se aprecia bien la foto, la mano de Gigi Hadid es extremadamente larga, lo cual evidencia un exceso del retoque digital, para hacer ver a Graham más delgada. Además usuarios de Internet expresaron que la maniquí XL es la única que aparece cubriéndose el muslo.
La polémica terminó, cuando la aludida salió en defensa de la revista, ya que a través de su cuenta de Instagram manifestó: «elegí posar así, nadie me dijo que hiciera nada».