¿Eres mamá? ¿Te ha pasado que tienes una hija y sientes que tu relación con ella es un poco más tensa que con tus hijos hombres? ¿Por qué sucede esto?
Según una encuesta realizada por Netmums, web británica especializada en relaciones familiares, las madres son más exigentes con sus hijas que con sus hijos. Dentro de los resultados, el 55% afirma que formó un vínculo más fuerte con sus hijos. Además, el 21% de las madres admiten ser más severas con las chicas y sólo un 11,5% con los chicos.
Pero eso no es todo, porque de acuerdo con una investigación de la Universidad de Cambridge, las discusiones entre madres e hijas en la adolescencia pueden ser positivas para su relación. ¿La razón? Aunque no sea muy óptimo, se usan como medio de comunicación.
Sobre este tema también se han escrito textos como el de Linda Mintle, doctora y autora del libro «Amo a mi madre, pero…», quien a través de esa publicación entrega algunos consejos para mejorar y resolver conflictos entre madres e hijas. Algunos de ellos son:
- Sé clara y di lo que piensas para evitar malos entendidos. No olvides la importancia de saber escuchar a tu mamá o a tu hija.
- No ocultes resentimientos y trata de resolverlos lo más pronto posible, porque cuando callamos, albergamos resentimientos que con el tiempo, sólo crecen y empeoran la situación.
- Respeta los límites e individualidad, ya que una buena relación entre madre e hija no implica que las dos estén de acuerdo en todo.
¿Cómo es tu relación con tu hija?