Si quieres gozar de un cutis libre de imperfecciones, te encantará descubrir los beneficios de esta mascarilla a base de linaza.
Se trata de una semilla que contiene mucílagos y pectinas, ideales para suavizar la piel, así como para reducir la aparición de arrugas, aclarar las manchas y eliminar las toxinas que generan los brotes de acné.
Pero además la linaza es rica en componentes antibacterianos como el ácido acético, málico, ferúlico, luteína y cisteína, los cuales ayudan a proteger la piel contra el envejecimiento prematuro.
¿Cómo beneficiarte de estas propiedades? Aplícate la siguiente mascarilla casera dos o tres veces por semana.
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Ingredientes
- Dos cucharadas de semillas de linaza
- Media taza de agua
Preparación
-Hierve el agua y cuando esté en punto de ebullición, añade las semillas de linaza. Deja cocinar a fuego lento hasta que quede una pasta espesa y viscosa.
-Una vez fría, aplica la mezcla sobre tu rostro y cuello limpios. Deja actuar durante 20 minutos y enjuaga con agua tibia.
-Para finalizar, aplica tu crema hidratante habitual.
Recuerda que también puedes aprovechar otras propiedades de la linaza si la incluyes en tu alimentación diaria.
Entre ellas, activar el metabolismo, regular el sistema digestivo, controlar los niveles de glucosa y colesterol, y mantenerte en un peso estable.
Asimismo, la linaza se considera un afrodisiaco natural, ya que evita tanto la impotencia del hombre como la frigidez de la mujer, cuyas causas se deben al bloqueo de la circulación sanguínea en las arterias.
¿Cómo se consume?
La linaza puedes tomarla en jugos o licuados, así como sustituto de granola en la fruta o yogurt, o bien, en ensaladas y hasta disuelta en agua.
Para los más atrevidos, pueden intentar preparar sus propias recetas con linaza, ya sea en panqueques, hot cakes y hasta platillos más elaborados que contengan pollo o pescado.
Se recomiendan dos cucharadas en cualquiera de las formas recomendadas.