Una inédita medida tomó el Reino Unido. Prohibieron a las empresas obligar a las mujeres a llevar tacones y maquillarse, informó el Comité Parlamentario de Igualdad para las Mujeres de Londres.
Todo comenzó cuando Nicola Thorp, recepcionista de la empresa Portico fue enviada a su hogar, y sin goce de sueldo, por estar con zapatos planos. Además se informó que la compañía tenía una serie de normas estrictas de maquillaje, del que deben estar pendientes a lo largo de su jornada laboral y se les tiene prohibido que se noten las raíces en caso de que se tiñen el pelo, informó «The Guardian».
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A raíz de esto Thorp, inició una campaña para que a las mujeres se les permita asistir con zapatos bajos al trabajo, presentando la moción al sitio web de peticiones del Gobierno, acumulando más de 150 mil firmas.
Dada la cantidad de firmas juntadas, el organismo se vio en la obligación de responder aduciendo que desde el 2010 se prohibía la discriminación de ese tipo, pero no tienen una política para monitorear que estas normas se cumplan.
La petición de no usar tacones es una medida que no solo va por el lado de la comodidad, sino también por el de la salud. Especialistas han establecido que existe una relación entre el uso prolongado de tacones con el deterioro de las articulaciones.