A un día después de la polémica entrevista de Meghan Markle y el príncipe Harry con Oprah Winfrey, el palacio de Buckingham, la residencia de la Reina Isabel II, emitió un comunicado en nombre de ella.
El texto, más bien conciso, decía:
«Toda la familia está apenada al conocer hasta qué punto han sido difíciles los últimos años para Harry y Meghan. Los temas que se han tratado, sobre todo en el aspecto racial, son preocupantes. A pesar de que algunas visiones de lo ocurrido varían, se tomarán muy en serio y se tratarán de manera privada por la familia. Harry, Meghan y Archie siempre serán miembros muy queridos de la familia».
Las potentes declaraciones de los duques
Durante el domingo pasado, se transmitió la esperada entrevista de Harry y Meghan con Oprah, la cual duró dos horas. Un día después fue transmitida en el Reino Unido.
En el espacio, los duques de Sussex revelaron las dificultades que enfrentaron durante el tiempo que fueron miembros ‘senior’ de la Familia Real británica.
También hablaron de su vida en California y el segundo embarazo de Meghan, donde ellos revelaron que estaban esperando una niña.
Pero una de las declaraciones más sorprendentes fue cuando la exactriz reveló que alguien le había preguntado a Harry sobre cuán oscura sería la piel de su primer hijo, Archie, cuando ella recién estaba embarazada. Pese a la gravedad del tema, ninguno señaló quien o quienes fueron los participantes de esta discusión.
Según el medio Hola!, el palacio de Buckingham estuvo en silencio el primer día, aunque el mundo esperaba una respuesta. Acorde al Daily Mail, el retraso al emitir un comunicado se debe a la ‘falta de confianza’ entre los Windsor y los duques e Sussex, con miedo de que un desmentido sin investigar provoque que Harry y Meghan digan el nombre de la persona que habló sobre la piel de su primer hijo.