Si eres de esos trabajadores que tienen muchas responsabilidades, pero que fácilmente su mente se va a otro mundo o se dedica a revisar redes sociales, debes conocer la regla de los dos minutos.
¿En qué consiste la regla de los dos minutos?
La regla de los dos minutos fue concebida por David Allen, la mente detrás del método «Getting Things Done» (GTD). Básicamente sigue aquel viejo consejo de “no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”, aunque aún más ampliado.
Existen tareas diarias que son fáciles y que por lo mismo dejamos para después como, por ejemplo, sacar la basura o lavar los platos, el problema radica en que las postergamos tanto que recién nos acomodamos a limpiar cuando está todo sucio, demorándonos mucho más tiempo.
Para remediar esto, el experto señala que si la tarea lleva menos de dos minutos en realizarla, hazla de una vez sin pensarlo, con esto te aseguras de tener más tiempo para otras actividades más demandantes.
Además explica la importancia de crear hábitos, aunque esto cuesta más de lo propuesto, pero con el tiempo será tan mecánico que no te darás cuenta del tiempo que ahorras.
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Lo importante de este método es que se puede aplicar a cualquier aspecto de la vida, como por ejemplo si deseas hacer ejercicio pero no te animas, a enviar correos electrónicos pendientes de tu trabajo o simplemente barrer.