¿Cita especial este fin de semana? Que ningún detalle se te olvide.
Que reduce el tamaño de los poros, que permite aplicar el maquillaje de mejor forma, que lo fija de una forma increíble. Todo eso hemos escuchado del primer. Pero, ahora aclaramos qué es y por qué tiene que estar en tu cosmetiquero:
Lo primero que debes saber es que el primer de maquillaje es un producto que te permite acondicionar la piel para ser maquillada, ayudándote a suavizarla y emparejando la superficie, con lo que la apariencia de los poros y las arrugas finas se reduce y la base queda mejor distribuida.
En el mercado existen varios tipos de primer, que se adaptan a tu tipo de piel:
- Primer libre de aceite:
Esta clase de primer es el más recomendable para todas, ya que disimula los poros, sin taparlos por completo, por lo que no hay posibilidad de que aparezcan granos en tu cara. El primer libre de aceite se encarga de mejorar la superficie de la piel para que luego puedas aplicar la base.
- Primer corrector:
Puedes encontrar primers con tonalidades verdes, rojas y amarillas que te ayudarán a disimular imperfecciones fuertes como cicatrices o manchas.
- Primer con color:
Si lo que buscas es mejorar el efecto de la base. puedes optar por el primer con color. Con este producto lograrás el tono perfecto para tu piel.
¿Cómo utilizar el primer?
Para que tu maquillaje quede perfecto, tu rostro debe estar bien limpio e hidratado.
Si bien es recomendable aplicar el primer sobre todo el rostro, lo ideal es que te enfoques en las áreas de tu piel que más lo necesitan.
Espera a que la piel absorba el primer y luego sigue con la base.
Fácil y bonito.
