En 2014 la foto de prontuario de Jeremy Meeks dio la vuelta al mundo y no precisamente por sus antecedentes penales. Tod@s quedamos en shock con sus ojos azules almendrados, su rostro varonil, su piel tostada y un largo etcétera (lee más acá).
Estaba pintado para ser modelo, pero primero tenía que cumplir con su condena por delito de posesión de arma de fuego.
Apenas salió de la cárcel, en marzo de este año, una agencia de modelos llamada White Cross Management lo reclutó. «Quiero agradecerle a mi familia y a todo el mundo por todo el amor, apoyo y oraciones. Estoy abrumado y agradecido por todo lo que viene a continuación. Estoy listo», escribió Jeremy en su Instagram el mismo día que dejó la cárcel.
Y esta semana, por fin, se difundió la foto de su primer trabajo oficial como modelo.
El guapetón estaría cumpliendo con arresto domiciliario, pero planeando sus próximos proyectos como modelo.
¡Aplausos para Jeremy!