Hoy en día son muchísimas las academias que imparten clases de danza del vientre. Una actividad en la que movimientos de cadera y cintura son protagonistas, con un bajo impacto que no incluye saltos ni movimientos bruscos.
Si te animas a practicar esta disciplina, conseguirás muchos beneficios más allá de bailar y pasar un buen rato. ¡Toma nota!
- Tonifica el cuerpo, especialmente el abdomen, los glúteos, las piernas, las caderas y los hombros.
- Mejora la coordinación.
- Ayuda a quemar grasas, aunque no es el mejor ejercicio para perder peso debido a que los movimientos son mucho más pausados que los de otras prácticas deportivas.
- Mejora la postura corporal, ya que permite tomar conciencia de las diferentes posturas que se van adoptando y, por tanto, corregirlas.
- Alivia los dolores de espalda y previene la aparición del molesto lumbago.
- Al actuar sobre los órganos situados en la zona pélvica, como son el útero y los ovarios, reduce las molestias propias de la menstruación, mejora las relaciones sexuales y previene los desprendimiento de vagina.
- Favorece la digestión y acaba con el estreñimiento al estimular el buen funcionamiento de los intestinos.
- Cuida la salud del sistema cardiovascular.
- Contribuye a reducir la ansiedad y el estrés.