El agua es uno de los elementos vitales que constituyen a nuestro organismo. Y es que además de mantener al cuerpo hidratado y activo, su consumo genera que absorbamos todos los nutrientes necesarios, a la vez que nuestra piel luce más sana y luminosa, entre otros beneficios.
Por eso es que es fundamental beberla durante todo el día, especialmente en temporada de calor. No obstante, si adquieres la costumbre de tomar un vaso de agua todas las noches, notarás importantes cambios en tu salud. ¡Toma nota!
- Evita la deshidratación.
- Ayuda a conciliar el sueño y a dormir más relajado.
- Acelera el proceso digestivo, por lo que en la mañana le será más fácil a tu organismo depurar y eliminar toxinas malas.
- Previene calambres nocturnos en las piernas y en los pies.
- Ayuda a regular la presión sanguínea.
- Relaja tu sistema nervioso.
- Contribuye a lograr un mejor funcionamiento de los músculos.
- Previene infartos o derrames cerebrales.
- Disminuye el efecto de la resaca (en caso de haber tomado alcohol).
¡Ya lo sabes! No olvides beber un vaso de agua todas las noches y tu salud te lo agradecerá.