El animador se hizo el tiempo para acompañar a su hermano, quien se va a ‘catar’ sanguchés por más de 30 países.
Ayer se supo de la difícil situación que pasa Máximo Menem Bolocco, sobrino de Diana Bolocco. Por lo mismo, Cristián Sánchez acompañó a su señora el día de ayer en la Clínica Las Condes, donde está internado el niño de 14 años. Sin embargo, y haciendo una pausa en el difícil momento que viven las Bolocco, el animador de TVN fue hasta Jardín Mallinkrodt para despedir a su hermano menor, Felipe Sánchez, quien parte de gira la próxima semana.
El hermano del animador es parte del proyecto «365 Sánguchez por el mundo», donde buscarán distintas preparaciones en 33 países diferentes durante un año. Sánchez parte junto a su polola, Catalina Barra, quien renunció a su trabajo para acompañar a Felipe. «Eso se llama amor verdadero», dice ‘Pipe’.
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Pero a la cita casi no llega Cristian Sánchez. Y es que el estado de salud de Máximo ha puesto en alerta a la familia de los animadores de TV. Entre los motivos de su posible ausencia, se barajaba el no querer referirse al hijo de la ex Miss Universo, sin embargo Sánchez llegó hasta Barrio Bellavista, donde llegaron hasta los padres del animador de «Muy Buenos Días».
«Vinieron todos los hermanos (siete en total), mis sobrinos y mis viejos también. Pipe es mi ahijado y me encanta porque es idealista, emprendedor y jugado. Se merece todo lo que está pasando. Es un estilo de vida que me encanta, es una envidia sana y creo que está en el momento para hacerlo», dijo Cristián, quien se excusó de hablar del delicado escenario médico de Máximo.
