Un desafortunado incidente con una niña tiene a Kendall Jenner en todos los portales internacionales. Al parecer, la modelo estaba sentada en una terraza cuando su perro de raza doberman mordió a la menor, para luego darse a la «fuga».
Por fortuna, la niña no necesitó puntos, pero eso es algo de lo que Kendall se debe estar enterando por la prensa, porque abandonó el local sin interesarse por el estado de la pequeña, recoge La Vanguardia.
La situación ocurrió en la terraza del restaurante Beverly Glen Deli, en Los Ángeles, el pasado domingo por la mañana. La policía de la ciudad recibió una llamada al 911 alertando sobre el ataque de un doberman a una niña que estaba sentada con su familia en el lugar.
Cuando la madre de la niña atacada buscó a Kendall, se llevó la sorpresa de que la modelo había abandonado el restaurante sin siquiera preguntar cómo se encontraba la víctima. Tampoco dejó ningún contacto en caso de que la familia de la menor necesitara hablar con ella.
Kendall ha compartido en Instagram algunas fotos junto a su mascota, y en palabras de la propia modelo,»es muy lindo pero te puede arrancar la cara de cuajo». Y vaya que tiene razón, en lo segundo.