Por estos días Marie Kondo se ha transformado en un fenómeno mundial con miles de personas inundando las redes sociales con registros ordenando y siguiendo el método #KonMari.
No obstante, la gurú del orden también se ganado una serie de detractores y una de ellas es Rhian Deutrom.
La periodista señaló en una columna que los libros y series de la japonesa «pueden traer calma y orden a las personas de todo el mundo, pero sus ideas fantásticas han causado estragos en mi hogar«.
En el escrito la mujer cuenta que su primer acercamiento con Kondo fue en 2015 tras leer uno de sus libros, sin lograr los resultados esperados.
«La experiencia provocó más cansancio que alegría y pronto me encontré en un lío existencial, en el que cuestioné cosas estúpidas como ‘¿Puede un sujetador sin tirantes, que cumple una función práctica vital, realmente traerme alegría?’ ; ‘¿Esta camisa me hace feliz, pero fue hecha en Bangladesh así que mi felicidad viene a expensas de un obrero de fábrica mal pagado?'», redactó.
Tras el éxito de su serie en Netflix, Rhian volvió a darle una oportunidad a Marie, pero nuevamente obtuvo malos resultados. Todo los objetos de los que decidió deshacerse los guardó en bolsas, las cuales acumuló en la puerta de su casa por casi tres semanas.
La queja de la periodista, y de otras usuarias, es que en vez de ordenar la casa, el método Kondo pareciera transformar sus casas en ventas de garage más que en un hogar ordenado. Es decir, la cura terminó siendo peor que la enfermedad para ellas.
¿Y tú, has probado el método #KonMari? ¿Te ha dado resultado?