Nancy y su pequeño de 11 años paseaban por una playa de Gales en Estados Unidos cuando de pronto algo llamó su atención. Se trataba de una botella de vidrio con un papel enrollado con letras chinas ¿El contenido? Una linda historia de amor y despedida proveniente de la isla Gulangyu en el sur de China, a más de 9 mil kilómetros de donde fue encontrada.
La mujer entregó este documento a una amiga de esa nacionalidad, quien fue la encargada de traducir el texto. Aquí te la compartimos.
«El islote de Gulangyu es sorprendente, memorable, es el lugar de mis recuerdos más felices y, a la vez, más tristes. En este islote tan poco romántico y corriente, mi romance, que no había comenzado nunca, terminó. Tres o tal vez cuatro días quedan para recordar, para lamentar y sentir nuestras emociones, en los que tengo el permiso de disfrutar tranquilamente de estar contigo, verte, tenerte cerca… La vida debe continuar. Las cosas a las que te aferras siempre te detienen. Hay que seguir avanzando, seguir corriendo. Con todas las cosas sobre las que se puede pensar, el olvido se hace posible. Hay un dicho famoso: ‘Como no hay nada que puedas hacer al respecto, enfréntate con la realidad’. Tienes que ser feliz. No te vuelvas demasiado delgada, no sientas la necesidad de cambiar. Si quieres ser una buena persona, no hace falta cambiar, porque ya eres así. Estés donde estés, tómate un tiempo para pensar en paz y tranquilidad. Pasa tus días siendo feliz con alguien especial. Adiós, cariño mío, y adiós a nuestro islote de Gulangyu».