¿Eras de los que cree que encontrar pareja esa cosa de suerte y azar? Pues te tenemos una mala noticia, ya que la ciencia acaba de demostrar que encontrarnos a ese ser especial tiene que ver con que cumplan con determinadas características que están en nuestros genes.
Una relación estrecha entre los genes y el amor
Un estudio realizado por la Universidad de Queensland y dirigido por Matthew Robinson en Australia, analizaron los rasgos genéticos y físicos de miles de parejas, estudiando los marcadores genéticos. De esta forma, determinaron que si dentro de una pareja se encuentran los mismo marcadores hipotéticos, que significaría que ambas personas tienen los mismos rasgos.
El estudió concluyó que en general las parejas se forman en base a determinados rasgos en común, tales como la inteligencia, altura y peso. Es decir, las personas prefieren parejas que tienen genes similares en particular en cuestiones físicas e intelectuales.
Dándole forma a los genomas
Tanto en el mundo animal como en el de los humanos, los genomas son una forma de selección sexual, es decir que las parejas están modificando de a poco sus preferencias para lograr preservarse.
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En este caso, las parejas también parecerían tener una atracción en función de la educación, notoriamente los años de educación. Si bien esto no significa que una persona elige a su pareja en función de cuántos años estudió, sí implica que las relaciones parecerían estar vinculadas a intereses similares que se asocian al nivel de educación.
Como vez, aunque no lo queramos, estamos determinados genéticamente a una persona.