El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, siempre tiene algo que decir y en esta oportunidad quiso declarar abiertamente que es un padre feminista.
Así lo reveló en un artículo publicado en la revista Glamour, donde explicó que por esa razón apoya la campaña presidencial de Hillary Clinton porque podría ser la primera mujer en provocar un hecho histórico para Estados Unidos. «Y es sólo un ejemplo más de lo lejos que han llegado las mujeres en el largo viaje hacia la igualdad», agregó.
Por esta razón, Obama escribió un ensayo en su reciente cumpleaños número 55, el último que pasará en la Casa Blanca. Aquí explicó que sus creencias feministas comenzaron en su infancia, al criarse con una madre soltera, y luego en su rol como marido y padre de dos hijas. «He visto como Michelle (su esposa) ha compaginado las demandas de una carrera exigente con las de criar a una familia», redactó.
Y agregó: «Como muchas madres trabajadoras, a ella le preocupaba cumplir las expectativas y los juicios de la gente sobre cómo lo haría, sabiendo que menos personas cuestionarían mis elecciones (…) Al mirar atrás veo que, aunque ayudaba, lo hacía según mi horario y mis términos. La carga cayó desproporcionada e injustamente en Michelle».
Obama tiene dos hijas adolescentes, Malia y Sasha, lo cual lo ha vuelto más consciente del sexismo que existe en la sociedad y la «enorme presión» que sufren las jóvenes.
«Es importante para ellas que denuncien cuando vean un doble criterio o se sientan juzgadas injustamente basándose en su género o su raza, o si ven que le ocurre a otra persona», añadió. Además, fue enfático al decir: «Y sí, es importante que su padre sea feminista, porque eso es lo que ahora se esperara de todos los hombres».
Dentro del discurso, también destacó que hay que ir progresando en la lucha sobre los roles de género y pide dejar de criar a las niñas «para que sean recatadas y a los niños para que sean seguros», dejar de «criticar a las niñas por hablar claro y a los niños por soltar una lágrima», dejar de «castigar a las mujeres por su sexualidad y de premiar a los hombres por la suya».
Y cerró: «Luchar contra el sexismo es también responsabilidad de los hombres. Como esposos, parejas y novios, tenemos que trabajar duro y deliberadamente para crear relaciones verdaderamente igualitarias. Tenemos que cambiar la actitud que felicita a los hombres por cambiar un pañal, estigmatiza a los papás a tiempo completo y penaliza a las madres que trabajan».
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