Un reciente estudio reveló que ingerir una sola bebida azucarada al día puede incrementar dramáticamente el riesgo de desarrollar varios tipos de cáncer.
Para llegar a esta conclusión, el equipo de la Universidad de Melbourne y el Consejo de Cáncer de Victoria, Australia, analizó a más de 35.000 personas que desarrollaron 3.283 casos de cáncer relacionados con la obesidad.
«Nos ha sorprendido encontrar que este aumento del riesgo de cáncer no está provocado completamente por la obesidad. El estudio muestra que cuantos más refrescos azucarados tomaran nuestros participantes, mayor era su riesgo de cáncer y éste no era el caso de aquellos que bebían refrescos light, sugiriendo que el azúcar es un contribuidor clave», señaló Allison Hodge, autora de la investigación.
«Incluso, individuos sin sobrepeso presentaban un incremento del riesgo de cáncer si bebían regularmente refrescos azucarados», agregó Hodge.
En total, los resultados concluyeron que aquellos enganchados a los refrescos azucarados tenían un riesgo significativamente mayor de padecer diabetes, enfermedades del corazón, caries y 13 tipos de cáncer.
Aunque el estudio se centró completamente en adultos, el Consejo de Cáncer de Victoria y sus asociados advierten que son los más jóvenes los que se enfrentan a un mayor peligro.