La vida humana podría seguir alargándose más allá del límite de 115 años indicado por muchos expertos, según plantearon en la revista «Nature» dos biólogos de la Universidad McGill de Montreal, Canadá.
Ambos investigadores aportaron como prueba un nuevo análisis estadístico de los datos relativos a los ultracentenarios reunidos desde 1968 hasta ahora en Japón, Francia, Estados Unidos y Gran Bretaña.
Se trata de un estudio que vuelve a encender el antiguo debate sobre la duración máxima de la vida humana que, hasta ahora, establecía un límite en torno a los 115 a 120 años.
No obstante, en desacuerdo con esta teoría, para los investigadores G. Hughes y Siegfried Hekimi no hay pruebas de la existencia de un límite para la duración de la vida pues, si este umbral realmente existiera, todavía estaría por ser alcanzado o identificado.
«No sabemos cuál podría ser el límite para la edad, pero extendiendo las líneas que indican las tendencias se ve que la vida promedio y la máxima podrían seguir aumentando en el futuro próximo», concluyeron.
Y de la misma opinión es Luca Deiana, biólogo molecular de la Universidad de Sassari, empeñado desde hace años en el estudio de los centenarios mediante el proyecto AKeA (A Kent’Annos).
«El límite de los 115 años no tiene sentido y no excluyo que en el futuro pueda ser superado. Sin embargo, es preciso recordar que la vida no es solo un cálculo estadístico: es algo que no conocemos completamente. La receta de la longevidad es larguísima y nunca completa», declaró el experto en una publicación.