Muchos chilenos padecen de nomofobia, aunque su nombre suena complicado, su significado es simple y claro: adicción al celular.
Un estudio realizado GFK Adimark y Entel, dejaron en evidencia lo dependiente que son los chilenos de este aparato. De hecho 8 de cada 10 tienen que mirarlo antes de ir a dormir. Pero algo peor: 45% de los usuarios ha revisado redes sociales después de tener sexo. El número crece hasta el 54% en el segmento de 25 a 35 años y llega al 56% en el segmento D.
La realidad es que el celular poco a poco va irrumpiendo en las relaciones de la gente. 56% de los consultados aseguró que en más de alguna ocasión se les ha pedido dejar a un lado el aparato en diferentes actividades y circunstancias. Otro 39% dijo que sus parejas le han reclamado por usarlo durante conversaciones.
No hay lugar ni situación que impida el uso del celular. Cualquier momento es excusa para usarlo. Si hablamos de lugares, la cama ocupa el primer puesto, ya que un 90% lo revisa antes de dormir y un 76% lo hace antes de levantarse por la mañana.
Con un 69% el baño también es uno de los espacios favoritos de los chilenos, y mientras almuerzan o cenan un 42% lo hace, siendo un 39% que lo ocupa para revisar whatsapp, facebook o mensajes de texto.
Ni siquiera si de trabajo se trata el chileno deja de mirar el teléfono. De los encuestados un 34% aseguró usarlo en reuniones y un 7% lo usó en entrevistas laborales, siendo los hombres quienes más cometen este acto.
Una necesidad
El celular es considerado una necesidad: 45% de los encuestados reconoció que prefiere que se queden las llaves o la billetera en casa, antes que el celular. Otro 64% dijo que el teléfono es más importante que el televisor o el computador, siendo las mujeres quienes lo priorizan más, con un 76% y los hombres con un 53%.
Lo bueno es que 55% ha pensado que usa mucho el teléfono móvil y reflexiona sobra su adicción.
¿Qué te parecen estos datos?