Desde el nacimiento de su hijo Ever en el pasado mes de agosto, Lea Michele ha compartido con sus fanáticos diferentes fotografías de su bebé.
Pero por primera vez la actriz relató la difícil experiencia que vivió durante su embarazo y que calificó como “muy aterradora”.
La ex actriz de Glee conversó con Katherine Schwarzenegger en “Before, during & After Instagram Live”, donde reveló su lucha con el Síndrome de ovario poliquístico y los difíciles episodios que vivió durante las 9 meses de gestación.
Su aterradora experiencia
“Tuve un embarazo muy muy intenso, muy aterrador. Nunca he compartido mi experiencia con nadie, lo cual creo que es algo que, ahora que soy madre, me veo haciendo de muchas maneras, a compartir sin miedo a no sonar perfecta o simplemente a tener miedo”.
El temor que sintió Lea Michele con su embarazo, comenzó cuando fue diagnosticada con “Síndrome de Ovario Poliquístico”. De hecho la actriz supuso que nunca sería madre, un tema muy delicado para ella.
“Realmente sentí que tal vez esto no debería ser para mí en ese momento. Siempre fue mi mayor temor en toda mi vida no poder convertirme en mamá. Es lo que he querido más que nada. Y emocionalmente, simplemente comenzó a construirse y construirse”.
Un embarazo sorpresa
Luego de que Lea Michele y su esposo Zandy Reich intentaran tener un hijo de forma activa por un año, la pareja desistió luego de no tener novedades.
Y es que el matrimonio debió someterse a diferentes tratamientos, con hormonas y cirugías que comenzaron a cambiar el cuerpo de Lea. ¿El problema? Nadie de sus compañeros de trabajo o directores sabía lo que ella estaba viviendo. “Por múltiples razones, realmente comenzó a afectarme mentalmente”.
Pero todo cambió en diciembre de 2019 cuando se enteraron que estaban embarazados. Con la buena noticia, la actriz continuó con sus proyectos. Pero antes de una actuación en Nueva York, tuvo un sangrado intenso que se prolongó durante su primer semestre. Tras este preocupante hecho, debió tomar medicamentos y hacer reposo absoluto durante un par de semanas.
“Fue simplemente horrible. Fue absolutamente horrible. Finalmente anuncié que estaba embarazada y todavía no estaba segura si el embarazo iba a durar”.
Lo más difícil para la actriz fue anunciar su embarazo y que todos sus seguidores pensaran que era algo maravilloso y perfecto, un efecto común de las redes sociales.
“El problema de las RR.SS es que la gente dice: ‘Oh, estás anunciado tu embarazo y es hermoso, estás usando un vestido lindo y todo se ve genial’. Pero ese día fue uno de los más difíciles”.
Disfrutar antes de dar a luz
Lea Michele pasó la mayoría de su embarazo muy asustada. Solo unos meses antes de dar a luz, fue informada que su bebé se encontraba completamente sano, lo que le permitió disfrutar el final de su experiencia antes de que esta terminara.
Decidida a tener un parto natural, la actriz sentía que era la única forma de mantenerse empoderada después de todo lo vivido. “Sentí que si podía tener la experiencia de tener un parto vaginal, podría mostrar mi fuerza. Sentí que tenía que terminar con eso, por la razón que fuera”.
Lamentablemente sus planes no salieron como esperaba. Su bebé no logró darse vuelta y a pesar de que se negaba, debieron practicarle cesárea. Su única petición fue que el personal médico le pasara a su bebé justo después de sacarlo de su vientre.
“Mi pequeño bebé es un luchador. Recuerdo que en el momento en que lo abracé, lo primero que le dije fue ‘lo hiciste tan bien’. Entonces pude mostrar mi fuerza”.
Reflexionando, Lea Michele se arrepiente de no haber compartido su experiencia con más mujeres, ya que le hubiese ayudado mucho más que estar en silencio y aislada.