Hace unos días Mila Correa sorprendió a sus seguidores en Instagram al confesar que a sus 35 años enfrenta el cáncer. La ex «Amor a Prueba», conocida también por su antigua relación con Junior Playboy, mostró su nueva apariencia tras perder su cabello.
Y es que en octubre de 2020 a la brasileña le detectaron cáncer de mamas, pero no fue hasta ahora que lo quiso hacer público. Pese a esto, desde un comienzo la exchica reality ha optado por enfrentar la enfermedad con gran optimismo.
En conversación con «LUN», Mila contó detalles de cómo ha vivido este proceso. «Llegó a mi vida de forma abrupta. Primero tuve unos cambios hormonales, con reglas que me duraban un mes, y después sentí algo duro en mis pechos”, partió contando.
“No está ramificado, solo ahí, pero es muy agresivo. De todas maneras, trato de no darle tanta importancia a la enfermedad, sino a lo positivo que se saca de esto”, agregó Mila Correa.
Mila Correa y el cáncer de mamas
Respecto a cómo ha enfrentado el cáncer, la modelo detalló: «me fortalecí físicamente con acupuntura, entrenamiento y empecé a comer alimentos que fortalezcan mi sistema inmune para que las quimioterapias no me peguen como una bomba”.
En enero de este año Mila Correa tuvo su primera quimioterapia y los efectos fueron inmediatos. Comenzó a perder pelo rápidamente, por lo que decidió raparse «como una forma de darme ánimo, de no darle tregua a esta enfermedad para que no se apodere de mí, incluso que no se apodere de mi imagen. He grabado y sacado fotos de todo el proceso».
“No ha sido fácil, no estoy grata con esto, pero estoy armándome esta nueva imagen. Trato de no cuestionar, lo tomo de la forma más positiva, pese a que el pronóstico no es bueno. Siento que la fuerza para soportar esto viene de mi interior: estar sin pelo, sin cejas, es superficial“, afirmó la brasileña.
Finalmente Mila Correa contó que decidió vivir este proceso en Chile, donde está acompañada de su prima y hermano.
«En todo este tiempo he llorado dos veces por el cáncer: cuando me hicieron la biopsia y cuando me entregaron los resultados. Me prometí no soltar ni una lágrima más por esta enfermedad. Puedo llorar hasta porque me corté un dedo, pero no por el cáncer, es darle mucho poder. Y yo saldré victoriosa de esto“, sentenció.