Los duques de Sussex sorprendieron a todos al integrar un nuevo miembro al Palacio de Kensington.
Si bien todos están expectantes a que sean padres, en esta ocasión Meghan Markle y el Príncipe Harry adoptaron un cachorro labrador, el cual se sumaría a Guy, el beagle de Meghan, que hace un par de meses viajó desde Canadá hasta el palacio de la familia real británica.
De acuerdo al diario Daily Mail, este nuevo cachorro «ya esta felizmente instalado en la casa. Y, al igual que sus dueños, dividirá su tiempo entre el palacio de Kensington y su casa de campo en Cotswolds».
Meghan tenía un perro labrador, llamado Bogart, el cual no pudo viajar hasta Inglaterra con ella por su avanzada edad y lo tuvo que dejar con unos amigos en Canadá.
¿Qué te parece este nuevo miembro de la Familia Real?