El 12 de febrero de este año, anunciamos a los ganadores de nuestro concurso Fotografiados del amor. Y esta vez, los ganadores fueron María Angélica Ríos y Luis Jauneaud, que en diciembre del año pasado cumplieron 50 años de matrimonio y lo celebraron casándose nuevamente. Lamentablemente, 2 días después de anunciar el premio, Luis falleció debido a complicaciones en su salud. Es por eso, que en FMDOS queremos plasmar su historia de amor, para que todos la conozcan.
Luis, era hijo de un zapatero. Además, sabía tocar la guitarra y por eso daba clases a quienes quisieran aprender. María Angélica, había visto en su negocio a este joven guapo, con quien de apoco empezó una amistad. De hecho, cuando Luis recibía mensajes en el teléfono, ella de los iba a decir y ahí comenzaron a cruzar miradas.
Pero no todo fue tan fácil, ya que «Lithita» estaba comprometida con un joven aviador de su misma situación económica. Pero flechada con el encanto de su nuevo amigo, le pidió autorización a sus padres para que Luis la visitara y le enseñara a tocar guitarra. Fue así, como se empezaron a frecuentar y de a poco a iniciar el amor.
Luchito, como le decían, sabiendo que su amada estaba comprometida, quiso evitar el dolor de verla casarse con otro. Por eso, tomó la decisión de irse a Antofagasta a empezar una nueva vida y así olvidar a su Lithita.
Pero María Angélica también estaba triste con la partida de Luis. Tenía que asumir que su mano ya estaba comprometida con ese joven aviador, pero sabía que su corazón pertenecía a Chito, como ella le llamaba con amor, diminutivo Luchito.
El amor pudo más
Sin embargo, fue la mamá de Luis quien cambió la historia. Consternada de saber que estos jóvenes se amaban, viajó hasta Antofagasta, para pedirle a su hijo que viniera a rescatar a su amada de los brazos de otro.
Fue así, que esa misma noche, Luis, escuchando a su corazón y a su madre que fue a buscarlo, dejo las llaves del garaje que cuidaba en Antofagasta y se vino devuelta a Santiago. Dejó todo cerrado, tiró las llaves al techo del recinto y se vino junto a su madre devuelta a Santiago con el fin de rescatar a su amor.
Le pidió a Lithita que se casara con él, y ella, sin pensarlo le pidió un tiempo para deshacer el compromiso que tenía y también tiempo para enfrentar está situación con su familia. Ya que, la familia se opondría a Luis, pues no le daría las comodidades a las que María Angélica estaba acostumbrada. Finalmente, habló con su familia, les pidió comprensión y días después le devolvió el anillo de compromiso al joven aviador.
Por amor, María Angélica renunció a una boda de lujos y prefirió estar al lado de su gran amor con quien tuvo tres hijos. Actualmente tienen cinco nietos, dos bisnietos y uno en camino.
Su vida, la vivieron de forma modesta. Luis trabajaba de guardia y lograron tener su casa propia en Cerro Navia. El amor que ambos se tenían, permitió que este joven matrimonio viviera feliz por siempre y para ellos cada 14 de febrero era un día especial.
Lithita y Luis se casaron un 12 de diciembre de 1970 en la Iglesia de Lourdes, y el 12 de diciembre del año pasado cumplieron 50 años de casado. Fue aquí donde celebraron sus Bodas de Oro, vestidos nuevamente de novios y renovaron sus votos.
La despedida de Luis
Lamentablemente, durante febrero, Luis cayó enfermo repentinamente. Fue aquí, donde la noticia de que eran los ganadores del Fotografiados del amor llegó, algo que alegró a toda la familia. «Para nosotros fue una luz de esperanza de que mi Tatita saldría de esto y pronto viajaría con mi Lithita a su luna de miel que nunca tuvieron… ese llamado de la radio nos dio esperanzas», nos contó su nieta.
Sin embargo, el mismo 14 de febrero, Luis falleció. Justamente en el día del amor, un día muy especial para la pareja. «Para nosotros como familia estamos destrozados porque este lindo matrimonio nos enseñó el verdadero significado del amor», nos cuentan.
