El cantante de «Despacito» tuvo que sufrir lo que cualquier inmigrante en Estados Unidos pasó al momento de estar en la escuela.
Luis Fonsi ahora es una megaestrella gracias al hit mundial que se ha escuchado en todos los rincones del mundo, pero en una entrevista con el diario El País confesó que cuando era pequeño, cuando recién su familia se mundo a Florida desde de Puerto Rico no la pasó nada de bien al ser objeto de discriminación.
El tímido Fonsi
“Con 11 años, recién mudado a Florida, sufría un bullying terrible por mi acento. Y a los 13, cuando empecé a salir con la primera chica, su mamá vio una foto mía, consideró que era demasiado morenito y le prohibió que siguiéramos juntos. La había invitado a mi senior prom, la fiesta de graduación, y me quedé sin mi date. Qué pena de gente, ¿verdad?
Por eso es que Fonsi se describe como un joven muy tímido y aún se siente un poco así, a pesar de exitosa carrera musical.“Aún hoy no me siento tan extrovertido como la mayoría de los artistas. Puedo ejercer de bromista, pero soy más callado”, confiesa Fonsi, que solo se le acaba la timidez cuando está en el escenario.
A sus 40 años, el artista puertoriqueño siente satisfacción del papel que su música puede ayudar a la internacionalización del español. “La mezcla de culturas se ha convertido de algún modo en mi misión. Me motiva comprobar cómo de repente un yanqui de Oklahoma accede a la música latina y se predispone a salir de sus géneros tradicionales. Y eso, en estos momentos de división, es muy importante”.
Al preguntarle por Trump responde que «…ese individuo tiene mucho que ver, porque ha destapado el odio y el racismo. Por fortuna, nadie puede tapar el sol con un dedo y muchos seguimos dispuestos a darle al mundo buena vibra”.